El Dr. Alfredo García Gruber, ha sido designado padrino del 53 Congreso Nacional de la Sociedad Venezolana de Cirugía Ortopédica y Traumatología, que del 13 al 16 de Septiembre de este año, se efectuará en Caracas. Toda una personalidad oriental, recientemente cumplió sus 83 años, 58 de los cuales ha dedicado a la especialidad médica de la Traumatología, y uno de los fundadores del Centro Médico Zambrano,

En su consultorio de esta emblemática clínica barcelonesa, recibe a sus pacientes con su sonrisa. Se levanta de su silla y puedes observar lo alto que es, pero sobre todo su presencia inspira confianza, sabiduría y humanidad. Es así como por donde pasa, la gente lo saluda con mucho cariño y sus pacientes lo esperan para oír su diagnóstico de las dolencias del sistema óseo.

El Dr. Alfredo García Gruber, nació en Ciudad Bolívar, el 10 de Septiembre de 1928. Hijo de Manuel José García y Maria Cristina Gruber de García, siendo el segundo de 3 hermanos.

Desde la temprana edad de los 9 años le atrajo la medicina “para tratar de curar a la gente”, además que tenía un tío que era médico, Juan Manuel García, graduado en 1898.

En su natal ciudad, estudio en la escuela La Milagrosa y el liceo Peñalver, donde conocería y se enamoraría de su futura esposa: Graciela García. El 5to año lo hizo en el liceo Aplicación, en Caracas.

En el año 1947 entra a estudiar medicina en la Universidad Central de Venezuela. La universidad estuvo cerrada durante los años 51 y 52, y mientras tanto García Gruber hacia de interno residente en la Maternidad Concepción Palacios y en el Traumatológico del Seguro Social, para así adquirir experiencia

Se graduó en 1953, en la Universidad Central de Venezuela, con 185 médicos más, en la promoción “Francisco de Venanci”, un hombre que luchó contra la dictadura de Pérez Jiménez.

García Gruber llega a Barcelona en 1953, trabaja de médico rural en Naricual y Pozuelos, y en las tardes, gracias a la generosidad del doctor Domingo Guzmán Lander, lo deja ejercer en el consultorio de su clínica, en la avenida 5 de Julio, (donde actualmente está el Banco Caribe), actividad que desarrolló por 6 años.

También a los 9 meses de graduado, se casa con la odontólogo Gabriela García. Con los ahorros que logró en su trabajo, toman rumbo a Italia y hace un Post grado en Traumatología y Ortopedia, en Boloña. Estando allá conciben a su primogénita, quien nace en 1961, en Caracas. Su hija Gabriela María, hoy en día, ingeniero industrial, Magna Cum Laude, de la Universidad de Orlando, Florida, EUA, casada y con 3 hijos.

A su regreso a Barcelona, se encuentra que Guzmán Lander alquila la clínica al Seguro Social, porque había sido nombrado Ministro de Sanidad, en el gobierno de Raúl Leoni, posterior a este hecho, además de trabajar en el hospital Razetti, es cuando comienza a prestar servicio en la Clínica Zambrano, de la calle Carabobo, donde en 1967, surgió el grupo promotor de la nueva sede de la avenida Caracas. Ellos fueron los doctores Tomás Zambrano, Ramón Moy, José Germán Riva, Jorge Yilo, y Alfredo García Gruber; infraestructura que entra en funcionamiento en 1973.


¿ Si tuviera que mandar un mensaje a los médicos, a los ciudadanos, al país, cuál sería?

A los médicos seguir trabajando con honor, con racionalidad y la mayor pasión con la profesión que hemos elegido, y a los ciudadanos, que realmente aprecien la actitud de los médicos que estamos todos dispuestos a trabajar por la salud de nuestros semejantes, constituyéndose también para nosotros, en una forma honesta de subsistencia.

¿ Ud. piensa que los hospitales públicos, deberían funcionar como las clínicas privadas? Ojalá fuera así. Cuando nosotros entramos al hospital Razetti en 1960, aquello tenía magnífica condiciones, una infraestructura planificada desde Suecia, era excelente, impecable y con mucha mística del personal médico y paramédico. Después de muchos años, eso se vino abajo y no había forma de cumplir con nuestros pacientes, y tuvimos que retirarnos. Concursamos para el hospital Domingo Guzmán Lander del Seguro Social, que era para esa época, un ejemplo, pero con el tiempo también decayó y me vi obligado a renunciar, quedándome únicamente con el ejercicio privado, en el Centro Médico Zambrano,

¿ Entre una unidad de quemado o una unidad de traumatología, medicina física y rehabilitación para la zona ?Cuando comenzó a funcionar el hospital Razetti, había una unidad de Traumatología y eso fue decayendo, porque no había material con que trabajar y todo esto incidía en el ánimo del personal. Así pasó también con el Guzmán Lander. Eso es lamentable, porque todos los ingresos que ha recibido Venezuela del petróleo, fue a otros países y no a su pueblo, quien es el que más lo requiere, por lo que una Unidad de Traumatología sigue siendo necesaria, con todo el material y los equipos para poder brindar el apoyo y la justa y adecuada asistencia a los pacientes.

Finalmente aprovechò la oportunidad para reiterar que siempre hay que mantener la honorabilidad y la honestidad de la profesión, para sentirnos orgullosos de ella.

Enviado por : Lic. Ana León CNP 3.900