Utilizar las Tecnología de la Información y la Comunicación (TIC) que los países tienen a disposición hoy en día para buscar soluciones eficaces ante el desequilibrio demográfico y epidemiológico de los países de la región, reducir las inequidades con la finalidad de avanzar hacia el desarrollo del sistema actual de salud (pública y privada), capacitar a los profesionales en áreas de TIC, y aumentar la participación de las autoridades públicas de salud en el diálogo y colaboración regional, fueron parte de los nuevos desafíos en políticas públicas que deben afrontar los países para innovar en materia de salud electrónica y telemedicina.

Así se lo plantearon algunos ponentes en el II Seminario Regional de Salud–e y Telemedicina en América Latina y el Caribe: Prácticas de innovación y estándares, organizado por el Sistema Económico Latinoamericano y del Caribe (SELA), los días 26 y 27 de Julio, con la participación y respaldo de diversas organizaciones de alcance nacional, regional y multilateral.

El SELA es un organismo regional intergubernamental, con sede en Caracas, Venezuela, integrado por 28 Estados de América Latina y el Caribe. Está  integrado por: Argentina, Bahamas, Barbados, Belice, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Chile, Ecuador, El Salvador, Grenada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Suriname, Trinidad y Tobago, Uruguay y Venezuela.

Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para marzo de este año, 230 millones de personas en América Latina y el Caribe no están protegidas por ningún tipo de seguro servicios básicos de sanidad y 135 millones no acceden a servicios básicos de sanidad, ya sea por razones socio-económicas o geográficas, así lo informó David Novillo, representante de ese organismo.

A juicio de Andrés Fernández, Coordinador de Salud-e, de la División de Desarrollo Social en la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), el acceso de estas personas a una atención médica oportuna y de calidad, está limitado por una variedad de factores como por ejemplo,  recursos públicos escasos, ingresos familiares reducidos, distancia (física y cultural) entre la oferta sanitaria y la población demandante, área de residencia, nivel de instrucción de la madre y estatus socioeconómico del hogar,  brechas por grupos étnicos, entre otros.

“Uno de los principales retos es lograr que los países de la región diseñen políticas y fortalezcan sus estrategias de telemedicina alineados con las políticas públicas de salud”, declaró Fernández, especialmente ante las tendencias que ya comienzan a afectar como el envejecimiento de la población, superposición de perfiles epidemiológicos, y la distribución espacial de la población.

Manifestó que los países regionales se están enfrentando a nuevos desafíos en la medicina en cuanto a enfermedades crónicas debido al incremento de la población y desequilibrio en sus áreas demográficas, asegurando que,  por ejemplo, en ciudades grandes como el Distrito Capital, incrementará en un 20% en el 2025, intensificando el desarrollo de enfermedades y reestructurando la demanda de atención médica.

Por ello, Fernández, recomendó “avanzar hacia la interoperabilidad con un primer nivel de acuerdo  con relación a un formato electrónico a nivel nacional para la identificación y registro único y unívoco de todos los actores del sistema de salud,  incluyendo instituciones sanitarias (públicas y privadas), profesionales de la salud y usuarios, aprovechar las prácticas exitosas, y avanzar hacia un marco normativo  que otorguen validez  médica y legal tanto al registro médico electrónico como a los actos médicos realizados mediante telemedicina”.

En consecución al planteamiento de métodos innovadores en materia de salud electrónica, Mario Paredes Suárez, Coordinador Telemedicina de Ecuador, expuso sobre las políticas públicas en materia de Telemedicina en la Amazonia, desde la propuesta operativa y práctica llamada “RED Pan Amazónica de Ciencia, Tecnología e Innovación en Salud”, la cual desarrolla programas y proyectos de salud en función a implementar tecnologías y aplicaciones actuales en telesalud y telemedicina en base a la conectividad satelital para conjugar la capacidad regional de diagnóstico.

Luis Núñez,  Gerente de Relaciones Académicas y vocero de Red de  Cooperación Latino Americana de Redes Avanzadas (REDClara) anunció la inclusión de la informática en la medicina como un hecho inevitable de la evolución y propuso el desarrollo de comunidades virtuales e investigación. Destacó algunas comunidades emergentes como CoLaBoRa (Comunidad Latinoamericana de  Bibliotecas y Repositorios Digitales)  y la ReLANS (Red Latinoamericana de Nanotecnología y Sociedad), entre otras.

Alaneir de Fátima Dos Santos, del Núcleo de Salud de la Facultad de Medicina en la Universidad Federal de Minas Gerais, Brasil, describió el proyecto de políticas públicas regionales de Telesalud en América Latina y el Caribe, financiado por el Banco de Desarrollo Interamericano (BID), del cual se derivan varias actividades a realizar, como la identificación de las mejores prácticas; la formulación o perfeccionamiento de los programas nacionales; la estructuración de dos grupos en la red universitaria  latinoamericana;  y la aplicación del curso de formación para gestores en telesalud.

Antonio Retrepo, Coordinador de Salud de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA) indicó que considerando las grandes dimensiones del reto de salud que plantea la zona amazónica del territorio sudamericano, con una población de 33 millones de personas entre los 8 países que la integran (Perú, Guyana, Ecuador, Colombia, Brasil, Bolivia, Surinam y Venezuela), la OTCA se ha propuesto impulsar la Telemedicina y Telesalud en la nueva agenda estratégica de cooperación amazónica, con el objetivo de “generar un marco operativo e instrumental  consensuado de estrategias e indicadores para la  institucionalización de la Vigilancia de Salud  Ambiental en la región amazónica, insertado dentro  de los sistemas nacionales de salud, compatible con  el Reglamento Sanitario Internacional y con el Plan Quinquenal de Salud 2010-2015 del Consejo de  Salud Suramericana de UNASUR, además de estar orientada por los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), fortaleciendo así, el proceso de cooperación regional amazónica en salud.

Paolo Rosa, Director Regional a.i. para las Américas, Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT-Ginebra), quien ofreció la conferencia magistral sobre el estado del arte de los estándares internacionales en Telemedicina y Telesalud, denotó la importancia de los asuntos clave  a considerar para su éxito, como la seguridad de datos y privacidad, el acceso a la salud a precios asequibles, los e-costos, la infraestructura para  compartir la comunicación con otras aplicaciones de las TIC que requieren los sistemas de seguridad e interoperabilidad, tales como gobierno y comercio electrónico.

Manifestó igualmente que la UIT se ha planteado cinco iniciativas para la Américas en el período 2011-2014, entre ellos, las comunicaciones de emergencia, la radiodifusión digital, el acceso de banda ancha y la absorción en zonas urbanas y rurales, la reducción de los costos de Internet, la construcción de capacidades humanas en TIC con énfasis en las personas con discapacidad y las personas que viven en zonas rurales y que están desfavorecidas.  También respaldó la estrategia regional y el plan de acción sobre e-Salud de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cuyos principios y valores se han estipulado en la agenda de la Salud para las Américas (2008-2017), enfocada en derechos humanos, universalidad, accesibilidad e inclusividad, solidaridad panamericana, equidad en salud y participación social.